miércoles, 27 de noviembre de 2013

Beyond Time: Adelanto capitulo 27

De ninguna manera, Edward.”
Bella, es una tradición.”
No me importa,” resoplé, con las manos en las caderas. “¡No voy a hacerlo!”
Edward rodó los ojos. “No entiendo porqué haces este escandalo por ello.”
¿Escándalo?” grité, aclarándome la garganta para bajar un poco los decibelios. “No estoy haciendo un escándalo, Edward. Estoy haciendo un punto. '¿Le servirás y obedecerás?' ¿En serio? Vamos a cambiar los votos.”

Bella, no podemos cambiar los votos.”

miércoles, 20 de noviembre de 2013

Beyond Time: Adelanto capitulo 26

“Puedo ir a esas clases por la mañana en Altoona y trabajar en la fábrica por la tarde Podré graduarme en enero y entonces podré solicitar plaza en la universidad, ya sea en Wisconsin o aquí en Chicago.”
“Eso es maravilloso, Edward.” Apreté su brazo. “Puedo ayudar, por supuesto. No quiero que te agotes trabajando mientras intentas acabar la escuela.”
Me besó la frente. “Todo merecerá la pena si estamos juntos. Esa es la mayor ayuda que hay.”
Le sonreí. “Lo digo en serio, Edward. Yo también puedo conseguir un trabajo. Quiero hacer mi parte.”
Edward frunció el ceño. “¿Un trabajo? No... no hay necesidad de eso.”
Reí. “Honestamente, no puedes esperar que me quede en casa todo el día sin hacer nada.”
Edward tiró de mí a un lado para evitar una gran piedra en el camino. “Bueno, por supuesto que no. Asumo que te encargarás de los deberes domésticos.”
Me enfurecí un poco, pero intenté mantenerme en calma. “¿Deberes domésticos? Te refieres a cocinar y limpiar.”
“Bueno, sí,” dijo Edward, “y, cuando tengamos hijos, habrá más cosas que hacer.”

miércoles, 13 de noviembre de 2013

Beyond Time: Adelanto capitulo 25

“Ahora dime qué ha pasado con tus padres,” dije un momento después. “¿Estaban enfadados?”
Sentí a Edward tragar con dificultad. “Al principio sí,” dijo lentamente. “Me llevó un rato convencerles, pero finalmente cedieron.”
Me senté recta y le miré con la boca abierta. “Estás bromeando.”
Edward se pasó una mano por el pelo. “No. Han aceptado todo.”
“¿El compromiso?”
“Sí.”
“¿La boda pequeña? ¿Antes de que termine el verano?” No podía creer lo que estaba oyendo.
“Sí. Han estado de acuerdo en que cuanto antes mejor,” contestó Edward. Había algo raro en su voz, pero no era capaz de descifrar qué.
“¿Y lo de dejar Chicago?” No podía imaginar que fueran a estar de acuerdo con eso.
“A eso también,” dijo Edward con una sonrisa. “Mi padre incluso ha dicho que llamaría a mi tío en Altoona para ver si podía encontrarme trabajo cerca.”
Pestañeé sorprendida.
“Altoona está en tu lista,” apuntó Edward.
Tragué. “Sí... lo sé.” Me froté la cara con las manos lentamente. “Es solo que estoy... impresionada. No puedo creer que se lo hayan tomado tan bien.”
Edward apartó la mirada y sus orejas se pusieron de un delator color rosa.
Entrecerré los ojos. “Edward, ¿qué está pasando?”
Se aclaró la garganta y acababa de abrir la boca para contestar cuando sonó otro golpecito en la puerta.
“¿Bella?” llamó Maggie desde la cocina. “¿Puedes abrir, por favor? ¡Tengo las manos mojadas!”
Resoplé, mirando a Edward con cautela mientras me levantaba para acercarme a la puerta. Él me siguió y, cuando agarré el pomo, susurró. “Probablemente sea mi padre.”